JULIO RAMÓN RIBEYRO
Nada más jamás. Jamás probar. Jamás fracasar. Da igual. Prueba otra vez. Fracasa otra vez. Fracasa mejor. Con esta sugestiva cita de Samuel Beckett, excelente, repleta de significados y muy conocida (y reiterada hasta la saciedad en múltiples foros, una insistencia a la que desde aquí contribuyo, mea culpa), os presento la edición de Buscando leones en las nubes de esta semana que retoma el tema del fracaso, aunque esta vez centrándolo en la figura de un escritor magnífico, cuya obra os recomiendo con entusiasmo, Julio Ramón Ribeyro, el autor peruano de cuyo nacimiento se cumplieron ochenta años el pasado 31 de agosto (no hay semanas suficientes para tantas efemérides en Buscando leones en las nubes).
Julio Ramón Ribeyro es un escritor formidable, que cuenta en su no muy dilatada trayectoria literaria (murió con apenas cincuenta y cinco años) con novelas, ensayos, teatro, colecciones de aforismos y reflexiones (excepcional su Prosas apátridas) y, sobre todo, cuentos, espléndidos cuentos, reunidos en una edición ejemplar por Alfaguara, que los presentó en 1994 con el título de Cuentos Completos. Julio Ramón Ribeyro es también el autor, y por ello protagoniza nuestra emisión de esta semana, de La tentación del fracaso, un voluminoso diario que recoge sus anotaciones personales tomadas entre 1950 y 1978. El libro lo publicó en 2003 la editorial Seix Barral, con estupendos prólogos de Ramón Chao (padre de Manu Chao, dicho sea entre paréntesis) y Santiago Gamboa. Os dejo aquí los enlaces a dos aproximaciones muy completas al diario del peruano en distintas revistas literarias. La primera, muy ceñida e interesante, aparecida en Letras Libres, la legendaria cabecera mexicana; la segunda, algo más densa y con más pretensiones, pero igualmente atractiva, en Espéculo, la revista de estudios literarios de la Universidad Complutense. De La tentación del fracaso están extraídas todas las citas de la presente edición de Buscando leones en las nubes, fragmentos que aluden a la insatisfacción, el sinsentido, el hastío vital, la frustración que acompañan a un jovencísimo aspirante a escritor que traslada a su diario las perplejidades, la angustia existencial, la melancolía crónica de una vida que se desenvuelve entre bandazos por distintos escenarios americanos y europeos (Madrid y Barcelona entre ellos).
Y acorde con el tono algo amargo y desesperanzado de los textos, aparece la música, también triste y melancólica. Unas canciones, sin embargo preciosas, interpretadas por Grant Lee Phillips, Lhasa de Sela, Cat Power, Lisa, Maria Gadú, Gigi, Vetiver, Zee Avi, Joe Henry, Sara Tavares, Eels y Lizz Wright.
En la sección de vídeos quiero ofreceros cuatro deliciosas versiones interpretadas por algunos de los artistas que han aparecido en el programa. En primer lugar la delicadísima recreación del Last night I dreamt that somebody loved me de los Smiths (¡salud para Morrisey, desvanecido hace un par de días en un concierto!) en la voz intensa y emocionada de Grant Lee Phillips, con un fondo de imágenes no demasiado evocadoras, a mi juicio, pero… ¡¡qué canción!! A continuación, Lhasa de Sela nos trae de nuevo a Leonard Cohen con su Who by fire. Detrás de ella, Cat Power, con la fantástica versión, tan triste, del Wonderwall de Oasis, mejor que la original. Y para terminar, la impresionante interpretación del Old man de Neil Young en la poderosísima voz de Lizz Wright.
Julio Ramón Ribeyro
Julio Ramón Ribeyro