lunes, 22 de diciembre de 2008


VIAJES...


Buscando leones en las nubes dedica, desde hace ya algunos años, la última emisión de cada temporada, la inmediatamente anterior al verano, al viaje. La proximidad de las vacaciones y la cercanía de la estación estival predisponen el ánimo hacia la aventura, hacia la búsqueda de experiencias desconocidas, hacia el descubrimiento de nuevos horizontes. Escojo entonces algunas reflexiones sobre el viaje para componer el programa, textos que hablan de esa pulsión fantástica, del placer de viajar, de la atracción del camino, de la emoción del vagabundeo, de los encantos y los peligros, de la fascinación y el hastío, de las promesas y las decepciones, de la libertad y la nostalgia y la locura y la pasión del viaje.

Pero como, además, el espíritu está alegre, y hay una especial y más intensa propensión a la felicidad, y la exaltación que trasmite la naturaleza desbocada se contagia, y la vida fluye por doquier, y todo, el sol, el cielo azul, las calles, las gentes, el mundo, conspira en favor de una visión entusiasta y apasionada de la existencia, Buscando leones en las nubes muestra también en esas emisiones su versión más optimista. Y así, el último lunes del mes de junio el programa se vuelve festivo, efervescente, eufórico, deslumbrante, como corresponde a la ocasión. Salen al aire canciones exultantes, llenas de ritmo, que invitan al baile. Justo la antítesis, por lo tanto, del estilo habitual de Buscando leones en las nubes, de nuestra tan apreciada melancolía, de la languidez acostumbrada, de las atmósferas íntimas, relajantes, sosegadas que nos definen e identifican.

El programa que dejo aquí ahora -también las vacaciones navideñas son una invitación a viajar- es el último del curso pasado. En él, los textos sobre el viaje fueron escritos por Ángeles Mastretta, Andrés Trapiello, M.G. Vassanji, Sándor Márai, José Saramago, Sebastián Guallar, William Maxwell, Gustavo Martín Garzo, Jan Morris, Colin Thubrom y Javier Reverte. Las canciones, algunas muy comerciales -pero, en música, no tengo prejuicios: lo que me gusta, me gusta, aunque salga en los 40 principales-, son magníficas piezas de Hercules & The Love Affair, Benjamin Biolay, Bruce Springsteen, Duffy, Manu Chao, Macire Scylla, Adriana Calcanhotto, Amy Winehouse, Madonna, Santogold y Fiamma Fumana.

Para darle colorido a esta entrada, 'cuelgo' también un par de vídeos: una interpretación no habitual, con la que no estaréis tan familiarizados, del Mercy de Duffy (con algún fallo técnico en la imagen, que no perturba gravemente, sin embargo, la posibilidad de su disfrute) y una fantástica intervención de Amy Winehouse cantando su formidable Rehab en el show de David Letterman.







Viajar 2008

martes, 16 de diciembre de 2008


DESPEDIDA 2008

Radio Universidad acomoda sus emisiones al calendario académico de la Universidad de Salamanca. En consecuencia, y teniendo en cuenta que las vacaciones navideñas comienzan el próximo dia 19 de diciembre, el programa de ayer fue el último de Buscando leones en las nubes de este trimestre y, por lo tanto, de este año 2008.

Como despedida del año (despedida en las ondas, pues en próximos lunes seguiré ofreciendo aquí, en el blog, algunos programas de temporadas pasadas para que no perdáis los buenos hábitos y no os 'desenganchéis' del todo de Buscando leones en las nubes) la emisión de ayer (que encaja en nuestra ya habitual denominación de 'Miscelánea') ofreció una muestra variopinta y heterogénea de textos interesantes y canciones deliciosas sin otro vínculo común que su interés y su calidad.

La parte literaria del programa la integran textos escritos por Philippe Claudel, John Connolly, Ann-Marie MacDonald, William Maswell, Juana Salabert, Adolfo García Ortega, John Lanchester, Vikram Seth, Antoni Casas Ros, Andrés Trapiello, Nancy Huston y Fernando Royuela.

La banda sonora de la emisión la constituyen canciones interpretadas por Toni Childs con Ayub Ogada y Peter Gabriel, Rufus Wainwright, Ornella Vanoni con Fiorella Mannoia, Heather Nova, Aster Aweke, Ed Harcourt, Anne Clark con Murat Parlak, Fernanda Takai, Till Bronner, Luka Bloom, Emmylou Harris y KT Tunstall.

Os dejo (para alegrar un poco una entrada tan austera) un vídeo con Rufus Wainwright al piano haciendo la versión del Hallelujah de Leonard Cohen que ha sonado en el programa. Hablando de 'alegrar', no es Rufus Wainwright, precisamente, el tipo más divertido del universo, pero en fin... (Mi intención era poner algún vídeo del Senza paura de Ornella Vanoni y Fiorella Mannoia, una canción que es todo un himno, entusiasta y festivo, que induce a la felicidad, a la exaltación, al baile, a la vida... pero los que he encontrado en YouTube son bastante pobres. Entrad, no obstante, y curisoead...)





Despedida 2008

lunes, 8 de diciembre de 2008


CITA EN TOMBUCTÚ

Esta semana, al ser hoy, lunes 8 de diciembre, festivo, no hay emisión regular de Buscando leones en las nubes. Aprovecho para dejar aquí un par de programas antiguos (que ya alguno de vosotros había solicitado) denominados de manera genérica Cita en Tombuctú.

Cita en Tombuctú es también el título de una excelente novela de Pep Subirós con la que el autor catalán obtuvo el premio Josep Pla en 1996. El libro, publicado por la editorial Destino en su colección Áncora y Delfín, es, sólo doce años después, prácticamente inencontrable, lo que da idea del absurdo en el que se mueve la industria editorial española, aquejada de una especie de 'fiebre de la actualidad' que conduce a una delirante invasión de novedades que (si hay suerte) permanecen en las estanterías de las librerías el tiempo justo para su fugaz contemplación (y poco más) por los potenciales y desesperados lectores. Dos meses después (como mucho) de su casi clandestina irrupción en los anaqueles de las librerías... el libro cae en el olvido, se devuelve a la casa matriz y allí, en sótanos que uno imagina siniestros, es guillotinado sin contemplaciones, víctima de las prisas, de la impaciencia, de la burda concepción de los negocios, de la inclemente política de editoriales y distribuidoras. En fin, los peajes de la acelerada 'modernidad'... Confiemos en que, como ha ocurrido con Le Clézio, omnipresente ahora en las librerías (¡¡no os lo perdáis!!), algún suceso externo permita la reedición de esta estupenda Cita en Tombuctú.

En la novela se cuenta, en esencia, una historia de amor y de pasión. Lisa abandona a Andrés para huir a África llevada por la fuerza de sus sueños, en busca de la mítica ciudad de Tombuctú. Al poco tiempo, el propio Andrés, espoleado por la ausencia y el deseo, saldrá a su encuentro. La novela se desenvuelve en diversos géneros literarios: el epistolar, la crónica histórica, los libros de viajes, la novela psicológica, la de iniciación; y se mueve igualmente en diversos planos, de los que destaco dos de ellos que me sirvieron de elemento clasificador a la hora de organizar las dos emisiones.

Por un lado, y este enfoque constituye la base del primer programa, hay un nivel que podríamos llamar 'objetivo', 'externo' a los personajes, que se refleja en textos que incluyen descripciones de la ciudad de Tombuctú, que hablan de su rica y misteriosa historia, de sus leyendas, de sus tradiciones, de sus mitos, de su espíritu inmemorial. Se trata de un acercamiento que recoge estampas de la legendaria ciudad africana, de sus gentes, recuerdos de su deslumbrante pasado, relatos, narraciones varias... Para ambientar esa atmósfera intensa y desconcertante, sugestiva y enigmática, los textos se acompañan de música, por supuesto de Malí, interpretada por algunas de las más destacadas figuras del fecundo universo musical del país africano, mostrando un mosaico deslumbrante de la riqueza sonora maliense: Habib Koité, Keletegui Diabaté, Tom Diakaté, Boubacar Traoré, Mamou Sidibé, Vieux Farka Touré con Toumani Diabaté, Issa Bagayogo, Rokia Traoré y el magnífico Alí Farka Touré al que ya conocéis como responsable de la sintonía de Buscando leones en las nubes.

La versión que se ofrece en el segundo programa, sin abandonar del todo la descripción del entorno maliense, es más 'subjetiva', más 'interna'. En ella se presentan las reflexiones que hacen los protagonistas de la novela de Subirós, esa pareja española, blanca, que, por separado, marcha a África tras sus sueños, tras sus ideales, tras su pasión, tras ellos mismos también. Son comentarios en relación al viaje, a su experiencia africana, a su deambular por las calles, por los ríos, por las arenas desérticas, en procura del amor perdido, en búsqueda de sentido para sus vidas. Y como marco sonoro de los pensamientos de estos dos europeos que viajan por Malí, la música de esta segunda emisión es también maliense pero con una perspectiva algo más abierta, más cosmopolita y multicultural, no centrada sólo en la desbordante producción musical del país africano. En este segundo programa suena, prácticamente íntegro, un disco extraordinario, Diario Malí, en el que se conjugan el genuino acento de la kora del artista de Malí Ballaké Sissoko con la delicadeza del piano del italiano Ludovico Einaudi, en un diálogo musical, en una conversación entre culturas que produce un resultado fascinante y arrebatador, sencillo y también, paradójicamente, muy refinado y sugestivo.



Cita en Tombuctú I


Cita en Tombuctú II

miércoles, 3 de diciembre de 2008



TOM WAITS. PRIMEROS 'CLÁSICOS'

Hace unas semanas os anticipé el inicio de una serie de programas dedicados a Tom Waits con ocasión de su entrada en el sexagésimo año de su vida. El próximo 7 de diciembre, el -para mí-genial cantautor californiano cumple 59 años y con esa muy frágil excusa Buscando leones en las nubes quiere ofrecer, a lo largo de todo un año, hasta el 7 de diciembre de 2009, cinco o seis emisiones (sobre la marcha iré concretando su número exacto) dedicadas a mostrar (en textos y canciones) el particular universo de uno de los más destacados protagonistas de la escena musical contemporánea.

En el programa de este lunes han salido al aire algunas canciones magníficas, algunos de los primeros 'clásicos' de Tom Waits, correspondientes a la etapa inicial de su carrera, editados entre 1973 y 1980 en el sello Asylum. Se trata de auténticas joyas, piezas inolvidables que ya están en la historia de la música popular del siglo XX: Martha y Ol'55, del álbum Closing time, de 1973; The ghosts of saturday night y The heart of saturday night, del disco con este último título, publicado en 1974; Tom Traubert's blues y The piano has been drinking, que aparecieron en 1976 en el disco Small change; Burma shave, del álbum Foreign affairs, de 1977; Blue Valentines, extraída del disco casi homónimo (Blue Valentine) de 1978; Ruby's arms, de Heartattack and wine, de 1980. La mayor parte de ellas fueron recopiladas en un disco posterior, The Asylum years, que en 1984 recogió lo mejor de esta muy fecunda etapa de debut de Tom Waits.

Para acercaros mejor el mundo de Tom Waits, el programa os ofrece, antes de cada una de las canciones, sus personalísimas letras (en traducción de Alberto Cajal, para la editorial Fundamentos), unos textos en los que están presentes todos los emblemas que describen, que definen el territorio del cantautor (por cierto, la mayor parte de sus canciones, a partir de 1980, fecha en la que la conoció, están concebidas en colaboración con su mujer, Kathleen Brennan, con la que sigue veintiocho años y tres hijos después). Por ellas deambulan prostitutas perdidas en una existencia carente de esperanza, soldados borrachos, vagabundos sin futuro, enanos de circo, turbios traficantes de droga, lamentables camellos, bailarinas de a diez centavos el baile, policías corruptos, repartidores de pizza, camareras de pelo teñido y uniforme desgastado... e inmigrantes mexicanos y proxenetas y tatuadores profesionales y boxeadores sonados y barrenderos y encargados de gasolineras y solitarios amarrados a la barra de un bar y saxofonistas que arruinan su vida en escenarios míseros tocando ante la indiferencia de tres o cuatro parroquianos ebrios y repartidores de periódicos y jugadores de billar y corredores de apuestas y pobres hombres que labran su imposible porvenir jugándose el alma con los dados marcados... perdedores todos, tristes perdedores, gentes sin futuro, despojos nocturnos, ruinas humanas...

Y el paisaje por el que desfilan todos estos espectros es también muy reconocible, muy de Tom Waits: bares de noche, todo tipo de bares, cervecerías malolientes, garitos infectos, clubes sórdidos, tugurios repletos de borrachos, drugstores mal iluminados por la última luz de una noche de derrota, y también gasolineras, carreteras, luces de neón, callejones oscuros y semáforos y gimnasios y cines de serie C y cárceles y parques de atracciones fuera de temporada y trenes de mercancías sin destino conocido y emisoras de radio que suenan en la madrugada... y máquinas de café y expendedoras de tabaco y navajas y pistolas y peleas y botellas rotas y mugrientos billetes de dólar... y desvencijados moteles de carretera y urinarios públicos y aparcamientos siniestros y coches de segunda mano y miserables hoteles por horas a los que chiquillas de cuerpos huidizos y apenas formados conducen a individuos de torvo semblante y burdeles de tercera con sábanas gastadas por sus múltiples usos...

Pero detrás de todo ello... la ternura, el amor, la belleza, la melancolía, la esperanza, la ilusión, el deseo... la poesía, la inmensa poesía que aflora en la voz desgastada, en la voz quebrada y áspera de un artista genial. Os dejo aquí el enlace a una página con decenas de vídeos de actuaciones de Tom Waits. Os dejo igualmente, para cerrar por hoy esta entrada al blog, su interpretación de Tom Traubert's blues, que también encontraréis en el programa.








Tom Waits. Primeros ‘clásicos’