martes, 9 de marzo de 2010


ALI FARKA TOURÉ. UN HIJO DEL RÍO

El 7 de marzo de 2006 murió en Bamako Ali Farka Touré, un mito de la escena musical maliense (la Real Academia proscribe el uso de este gentilicio, exige malí), uno de los grandes clásicos de la música africana, un personaje clave para entender el extraordinario impacto que están ejerciendo en muy distintos puntos del mundo a lo largo de estas tres últimas décadas los ritmos, el sonido, las canciones, la música de África. Ali Farka Touré, guitarrista genial, cantante singular, excepcional autor en cuyas composiciones es posible rastrear las ancestrales raíces africanas del universal blues contemporáneo, especialmente del norteamericano, es también el intérprete, en colaboración con Ry Cooder, otro extraordinario talento, de Diaraby, la melodía con la que desde hace once años, desde el comienzo de nuestras emisiones, abrimos y cerramos Buscando leones en las nubes. Entonces, hace cuatro años, pocos días después de su muerte, dedicamos a su figura un par de programas en los que presentamos los aspectos más destacados de su biografía, de su entorno familiar y personal, de su vida en Niafunké, su hogar maliense, así como de las peripecias de su larga carrera artística. Un artículo de la experta Lucy Durán constituyó la base de esa particular recreación de la rica personalidad humana y musical del malí. En la vertiente sonora de esas dos emisiones se ofrecían unas cuantas piezas extraidas de la amplia producción discográfica de Alí Farka Touré, especialmente, de The Source, Talking Timbuktu (con la decisiva colaboración de Ry Cooder, esencial para el conocimiento y difusión de Ali en todo el mundo), Niafunké e In The Heart Of The Moon (a dúo con Toumani Diabaté, una obra maestra), a mi juicio sus mejores álbumes. Quedaban fuera, por razones obvias, otros dos discos fantásticos, el póstumo Savane, y el muy reciente Ali & Toumani, que recoge piezas no publicadas de In the heart of the moon.

He decidido reeditar ahora, en el cuarto aniversario de su muerte, esos dos programas y ofreceros así la posibilidad de acceder a ellos, en semanas sucesivas, a través del blog. Os dejo también un par de vídeos en los que se pone de manifiesto la belleza de la propuesta musical de Alí Farka Touré. En primer lugar un formidable documento sobre la grabación de ese trabajo conjunto de Ali Farka Touré con Toumani Diabaté, en el que podemos escuchar a los dos músicos y a su colaborador circunstancial, también desgraciadamente fallecido, el cubano, Orlando ‘Cachaíto’ López, y, sobre todo, comprobar el extraordinario clima creativo que rodeó el registro del disco. Luego, una envolvente actuación en el Festival del Desierto de 2003, en Niafunké, interpretando Goye kur en una atmósfera también fascinante y mágica (¡lástima los molestos y excesivos créditos!).

PD.- Parece que la invasión publicitaria de hace siete días fue, tan sólo, un ataque coyuntural. Esperemos que no cunda el ejemplo y podáis disfrutar los vídeos sin la molesta irrupción comercial. Dejaré activa mientras tanto, por si acaso, en la columna lateral de esta página mi algo airada llamada de atención.




Ali Farka Touré. Un hijo del río

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias. Gracias por estos programas-regalo. Por acercarme estos genios, estas sensibilidades, por la emoción que me producen, por las sensaciones maravillosas que vivo con ellos. Leía en público (hace pocos días) un emotivo artículo de Carlos Fuentes sobre este genio y sobre su último infinito blues. Leedlo.

Alberto San Segundo dijo...

Gracias a ti, anónimo comentarista, por tu amabilísima participación. Te agradezco el entusiasmo y tu elogiosa valoración del programa.

Déjame, no obstante, hacer una puntualización. A mi juicio -acepto que discutible- el artículo de Carlos Fuentes en 'Público' al que haces referencia es (en más de la mitad del texto) una versión descarada, sin citar la fuente, del escrito de Lucy Durán sobre el que yo -ya en 2006, una semana después de la muerte de Touré, y mencionando la referencia, como es natural- elaboré los dos programas de la serie que se inició ayer y que tendrá su continuación el lunes próximo. Escuchad la emisión de hoy y la de la semana que viene, leed luego el artículo y tras cotejarlos tendréis un espléndido ejemplo de lo que hoy se ha dado en llamar, con cierta complacencia, 'intertextualidad'.

En fin, aspectos menores que no deben hacernos olvidar lo esencial: la maravilla de la música de Ali Farka Touré y lo impresionante de su legado artístico.

Gracias de nuevo, pues, por tu particìpación... ¡¡espero que puedas seguir disfrutando!!

Un saludo a todos

Anónimo dijo...

¿Juan Palomo??