martes, 15 de diciembre de 2020


ANIMALES QUE FABULAN 
 
Una semana más sale a vuestro encuentro Buscando leones en las nubes, el programa de música y literatura de la noche de los lunes en Radio Universidad de Salamanca, dirigido y presentado por Alberto San Segundo. Hoy llegamos a la tercera entrega de la serie centrada en la lectura y que originariamente estaba enmarcada entre dos celebraciones relativas al libro, el Día del Libro, el pasado 23 de abril, y la Feria del Libro, que debería haberse celebrado en nuestra ciudad entre el 9 y el 17 de mayo. Suspendidos ambos acontecimientos a causa del estado de alarma y de la excepcionalidad que el coronavirus ha supuesto en estos últimos meses, e interrumpidas también las emisiones de nuestro espacio, desde hace quince días hemos podido retomar el ciclo, que se adentra esta noche, como digo, en su tercera edición. 

En todos los programas de esta libresca serie tenemos como centro y motivo principal un ensayo extraordinario, El infinito en un junco, en el que una joven escritora y filóloga, Irene Vallejo, explora las innumerables facetas en las que se desenvuelve el universo de los libros y la lectura partiendo de su profundo conocimiento de las culturas griega y romana. Si estáis interesados en una mayor información sobre la muy sugerente obra os invito a consultar el blog de Todos los libros un libro, mi otro programa en esta emisora, la universitaria salmantina, en el que hace algunos meses presenté una completa reseña sobre el deslumbrante trabajo de la aragonesa. 

En el espacio de esta noche os dejo nueve fragmentos del apasionante estudio, en los que su objeto principal se examina desde perspectivas muy variadas: reflexiones genéricas sobre el valor de la lectura, experiencias personales de la propia autora, glosas de otros libros, anécdotas y curiosidades relativas a la invención y la historia de los libros y comentarios variados sobre reveladores episodios de su asombroso desarrollo a lo largo de los siglos. 

Complementando la intensidad de los textos sonarán nueve canciones, elegidas, como siempre, con la voluntad de crear un ámbito propicio a la reflexión y el disfrute, que facilite la degustación de las sugestivas palabras de Irene Vallejo y que, en definitiva, os permita participar de su belleza. Sus intérpretes son Ben Watt, Julia Biel, Van Morrison, Stacey Kent, Richard Hawley, Jill Sobule con Nicholas Ford, Devendra Banhart, Andrea Motis y el legendario arpista bretón Alan Stivell y la mucho más joven pero igualmente brillante cantante maliense Fatoumata Diawara, unidos en una magnética conjunción. 


Somos los únicos animales que fabulan, que ahuyentan la oscuridad con cuentos, que gracias a los relatos aprenden a convivir con el caos, que avivan los rescoldos de las hogueras con el aire de sus palabras, que recorren largas distancias para llevar sus historias a los extraños. Y cuando compartimos los mismos relatos, dejamos de ser extraños. 

Hay algo asombroso en el hecho de haber conseguido preservar las ficciones urdidas hace milenios. Desde que alguien narró por primera vez la Ilíada, las peripecias del viejo duelo entre Aquiles y Héctor en las playas de Troya nunca han caído en el olvido. Como escribe Harari, un sociólogo arcaico que hubiera vivido hace 20.000 años, bien pudiera haber llegado a la conclusión de que la mitología tenía muy pocas posibilidades de sobrevivir. Al fin y al cabo, ¿qué es un cuento? Una secuencia de palabras. Un soplo. Una corriente de aire que sale de los pulmones, atraviesa la laringe, vibra en las cuerdas vocales y adquiere su forma definitiva cuando la lengua acaricia el paladar, los dientes o los labios. Parece imposible salvar algo tan frágil. Pero la humanidad desafió la soberanía absoluta de la destrucción al inventar la escritura y los libros. Gracias a esos hallazgos, nació un espacio inmenso de encuentro con los otros y se produjo un fantástico incremento en la esperanza de vida de las ideas. De alguna forma misteriosa y espontánea, el amor por los libros forjó una cadena invisible de gente —hombres y mujeres— que, sin conocerse, ha salvado el tesoro de los mejores relatos, sueños y pensamientos a lo largo del tiempo. 

Esta es la historia de una novela coral aún por escribir. El relato de una fabulosa aventura colectiva, la pasión callada de tantos seres humanos unidos por esta misteriosa lealtad: narradoras orales, inventores, escribas, iluminadores, bibliotecarias, traductores, libreras, vendedores ambulantes, maestras, sabios, espías, rebeldes, viajeros, monjas, esclavos, aventureras, impresores. Lectores en sus clubs, en sus casas, en cumbres de montaña, junto al mar que ruge, en las capitales donde la energía se concentra y en los enclaves apartados donde el saber se refugia en tiempos de caos. Gente común cuyos nombres en muchos casos no registra la historia. Los olvidados, las anónimas. Personas que lucharon por nosotros, por los rostros nebulosos del futuro.

Animales que fabulan

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mucha belleza en los relatos y en la música!
Gracias!, así si se puede desconectar del caos q nos rodea.
Saludos
India

Alberto San Segundo dijo...

Gracias, India

Me alegro de que te gusten los programas. Y sí, desconectar (en todos los sentidos) es lo que necesitamos...

Un saludo